20.1.12

Fin de otra etapa

Hoy ha terminado otra etapa. La de ir a la Facultad a "clase"... Si, así es la carrera de Magisterio, llega 3º, y cuando estamos en (casi) febrero, yo ya puedo decir que no voy a tener mas clases universitarias (por ahora), porque lo que queda, sin duda, va a ser lo mejor de la carrera, por lo que de verdad he estado "sufriendo" estos tres años seguidos.

Después de tantos trabajos, horas de clase muertas, cafés en el Dani y Jose... ha llegado el momento de la verdad, el momento de enfrentarme a un aula con niños de carne y hueso, y no los que nos inventábamos para situar un trabajo de Didáctica, o de Geografía...

Tengo que volver la vista atrás al año 2009. Era Julio, y yo ya había echado la matricula para un módulo de Grado Superior en el Giner de los Rios. En mi casa no me decían nada, que yo era mayor como para saber lo que quería.

Dentro de mi, siempre había deseado ir a la Universidad, pero de aquella, la situación económica de mi familia no podía soportar los gastos que conllevaba. 
Pero una tarde, le pedí a mi madre que si me acompañaba, la lleve hasta el Campus y la dije, ¿tu crees que yo podría sacar una carrera, mama?. Recuerdo que ella me respondió que yo valía para hacer una carrera y lo que quisiera. Tras ello nos encaminamos a recoger el sobre a la Facultad de Educación. 

No me dijo nada en ese momento, pero después he sabido lo orgullosa que se sintió en ese momento, el único de sus hijos que iba a hacer una carrera, como lo contaba por ahí. 

Y comenzó 1º. Como no, llegué un par de semanas tarde, por eso de los viajes, y nada mas empezar un mundo nuevo, lleno de gente nueva, formas nuevas de aprender.

Los primeros días fueron duros, pero logré conocer gente que hasta el día de hoy no me han fallado.

Esas clase de Castañeda, que recuerdos. Ahí es donde empecé mis periplos en la Representación estudiantil, casi sin querer, pero eso ya son otras historias.

Tras pasar el primer cuatrimestre, la desgracia sobrevino a mi casa. Mi madre enfermó dos duros meses de idas y venidas y noches en el Hospital. Al final, el duro desenlace me marco de manera fuerte. Yo en mi interior juré y perjuré que no la fallaría, que yo acabaría la carrera y haría que mi madre se sintiera orgullosa de mí allá donde se encuentre.

Ya sabéis que las cosas no siempre son como se plantean. empezaron a flaquearme las fuerzas, pero aun así aprobé todo.

Llegó Septiembre y tras un duro verano, no me veía capaz de continuar, ir a clase para mi era un suplico. Solo mi tarea como representante de estudiantes lograba sacarme de la cabeza los malos rollos y conseguía evadirme.

El no ir a clase, propició que varias de las personas por las que yo sentía mucho aprecio, mostrasen de verdad como eran, y en ese momento aprendí que en la vida siempre hay que mirar por uno mismo, porque los demás no van a mirar primero por ti.

2º Sirvió para madurar como persona, y aunque muchos no comprendieran lo que hacía, yo logre aclararme y colocar mis prioridades.

El curso terminó de aquella manera, tampoco tan mal como me pronosticaron, nada que no se pueda solucionar.

3º Ha sido el año en el que las frustraciones por la carrera han ido en aumento. Estudiar algo que en realidad no te está capacitando para ejercer de Maestro, me llevo a querer luchar por que el sistema cambiara. Gracias a ello he conocido a gente maravillosa, también relacioada con la representación Estudiantil a nivel nacional de los que he aprendido mucho y que me han contagiado las ganas por querer hacer algo para mejorar los planes de estudio de Magisterio.

Y hoy ha sido el último día de clase en esta facultad. Viendo a compañeros casi llorando por la despedida, y en mi interior solo hay un alivio. Alivio de pensar que ahora voy por fin hacer lo que de verdad me gusta. Enseñar a niños, y sabiendo que ahora va a ser cuando de verdad aprenda algo. Porque estos tres años solo han servido para que en un tiempo me den un título.

Se que esto que he puesto lo piensa demasiada gente, y por eso no ha de extrañar a nadie que lo diga.

Hoy ha sido un día raro. Ha sido la culminación de una etapa, con muchos aspectos muy buenos, que van a quedar grabados en mi memoria para siempre, pero también ha sido el final deseado.

Si enseñamos a los estudiantes de hoy como enseñamos ayer, les estamos robando el mañana.—John Dewey





13.1.12

Acto Universitario
Hoy por fin me he decidido, ya hay fecha para acabar este mandato como Presidente de la Junta de Estudiantes de la Universidad de León.

Después de varios días haciendo los preparativos, recopilando los datos de compañeros y revisando la diferente legislación relativa a la elección de representantes de estudiantes, he convocado el Pleno de disolución para el día 17 de Enero. Ese mismo día se constituirá el nuevo pleno, y a partir de ahí, ya veremos.

De todo lo que ha pasado desde el 23 de Febrero del año pasado, me gustaría reseñar que lo mas importante para mi ha sido todo lo que he aprendido. A relacionarme con los demás, a hablar en público (Aún me cuesta bastante), a valorar las pequeñas aportaciones de otras personas a tu trabajo, a organizar eventos, a negociar....

En definitiva, como representante de estudiantes, se aprende en muchos aspectos de la vida (Lo que los bolonios llamarían "Adquisición de competencias") y te ayuda a madurar y ver todo con otra perspectiva.

En el desempeño de mis funciones he conocido a numerosas personas que han allanado mi camino y quisiera mostrar en este post mi mas sincero agradecimiento. 

La incansable Estela Melcón, Grande de la representación en la Universidad de León. Gracias a ella he aprendido algunos de los límites hasta los que podía llegar. También me ha proporcionado ciertos contactos que solo ella podría conseguir y que gracias a ellos, hemos podido sacar adelante varios proyectos.

La trabajadora Nerea Blanco, que sin ser representante de estudiantes ha sido alma conductora de todos nuestros proyectos. Gracias a ella he aprendido a ser un poco mas humilde, a valorar el esfuerzo que los demás hacen en su justa medida. En ella he encontrado una amiga de la que aprender y con la que se puede tener una conversación hablando de miles de temas diferentes.

El GRANDE con diferencia Alvaro Martinez, buen compañero, mejor persona y sobre todo un currante nato. Gracias a el y a sus horas extras (Que aún no se de donde las saca) han prosperado proyectos casi imposibles. Siempre recordaré nuestras llamadas de teléfono (15 en dos horas) intercambiando ideas para llevar a cabo, Las conversaciones nocturnas que nos han dado alguna de nuestras mejores ideas. Se que de la representación te llevo como amigo y también se que vas a llegar lejos porque lo vales y así lo demuestras.

Como olvidarme de Almudena Fernández, otra de las mejores representantes que he conocido. A nivel de Facultad es un ejemplo a seguir. Su trato con la gente es exquisito, su conocimiento de la Institución muy amplio y como compañera no tiene precio. Gracias por los viajes que hemos hecho juntos y que nos han ayudado a ser mejores en lo nuestro.

Y aún queda mas gente que recordar, como Jacobo, Andrés, Nael... 

Sinceramente quiero agradecerles a todos su granito de arena con el que han contribuido a que yo sea mejor persona y mejor representante de estudiantes.

Ahora empieza una nueva época. Época en la que empiece a germinar la semilla que hemos plantado en el último año. No ha sido fácil, pero espero que a partir de ahora la representación se convierta en un árbol centenario que enraíza y cala en la comunidad universitaria.

Con respecto a mi, creo que por responsabilidad con los cambios realizados, debo presentarme, para en una segunda legislatura terminar con lo comenzado, y no dejarlo en un punto intermedio. Por ello convencido digo que me voy a presentar a la reelección como Presidente de Junta de Estudiantes de la Universidad de León.

Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes.

Khalil Gibran (1883-1931) Ensayista, novelista y poeta libanés.


9.1.12

Comienza una nueva etapa

Año de Cambio
Hoy, después de varios años sin escribir en un blog, he decidido comenzar de nuevo.

Reflexionando los últimos días, relacionado con el cambio de año y esas cosas, me he dado cuenta que 2012 va a ser un año de grandes cambios.

Me voy a enfrentar por primera  a una clase con niños de carne y hueso, ejerciendo de docente, y va a marcar un salto importante dentro de mi vida.

También debiera ser mi último año de Universidad, y ese si que es un cambio mas que superfluo. Va a ser difícil que esto sea así, pero no dejaré de intentarlo.

En cuanto a lo profesional, Espero que las cosas vayan a mejor. En mi coco hay ideas de negocio, que solo necesitan un empujón. Esperemos que el 2012 traiga los elementos necesarios para ello.

Por eso, como forma de cambio, he decidido abrir este blog, en el que intentaré hablar de las coas que me gustan. Educación, Representación, Informática, Política y algún apunte personal que se me escapará.

Os doy la bienvenida a mi blog

¿Por qué se ha de temer a los cambios? Toda la vida es un cambio. ¿Por qué hemos de temerle?
- George Herbert (1593-1633) Poeta religioso inglés.